¿Por qué siempre estoy resfriado?
Para poder estar 100% saludable es importante contar con un sistema inmunológico fuerte que sea capaz de vencer cualquier agresión externa como pueden ser los virus o las bacterias que producen las enfermedades.
A continuación vamos a indicarte las situaciones que pueden conllevar a que una persona siempre esté resfriada:
#1 Padecer anemia.- La anemia es una de las enfermedades que pueden producir un resfriado como sintomatología. El motivo es que las personas que padecen esta condición presentan una deficiencia de los glóbulos rojos, algo que puede provenir de una alimentación baja en hierro o de otros factores. Con una disminución de glóbulos rojos experimentamos una bajada de las defensas que pueden hacer que estemos más sensibles a la agresión de infecciones externas.
#2Tener diabetes.- Si padeces diabetes es posible que sufras de daño en los riñones (conocido como nefropatía diabética), esto ocurre debido a tener los niveles de glucosa alterados. Esto puede producir una bajada de las defensas así como una sensación de frío por todo el cuerpo que puede hacerte que estés más abierto a contagiarte con virus o bacterias externas.
#3 Sufrir de hipotiroidismo.- Tener una tiroides con poca actividad también puede ser uno de los motivos que respondan a tu pregunta de "¿Por qué estoy siempre resfriado?". Esta enfermedad puede afectar al sistema inmunológico haciendo que bajen las defensas y sea mucho más fácil que un agente infeccioso nos ataque.
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#5Infecciones micóticas.- En nuestro organismo habita la Cándida, una levadura que, si se altera, puede producirnos una infección por hongos haciendo que experimentemos síntomas como picores, cambio de apariencia de la piel, molestias, etcétera. Esta irregularidad afecta nuestro sistema inmunológico y, por tanto, es habitual que una persona con candidiasis también esté resfriada.
Otro de los motivos que pueden responder a la pregunta de por qué siempre estamos resfriados es que no sigamos “hábitos saludables” y, por tanto, no contemos con una salud fuerte y preparada para prevenirnos de cualquier agente infeccioso que pueda peligrar nuestras defensas.
A continuación vamos a indicarte algunos hábitos que pueden comprometer tu bienestar:
#1 Estar por debajo de tu peso.- Cuanto menos grasa corporal se tiene en el cuerpo, menos protección tenemos para combatir las bajadas de temperatura puesto que, nuestro organismo, consume más calorías cuando hace frío para intentar equilibrar ese cambio. Una persona delgada pierde más rápidamente el calor de su cuerpo y, por tanto, tiene más posibilidades de caer enferma.
#2Vivir con exceso de estrés y de ansiedad.- Llevar una vida estresada también puede afectar al correcto funcionamiento de nuestro sistema inmunológico. Al atacar el sistema nervioso alteramos nuestro biorritmo y podemos comenzar a experimentar afecciones como, por ejemplo, resfriados.
#3 Alimentación poco saludable y nutritiva.- Gracias a la alimentación, introducimos en nuestro cuerpo una serie de vitaminas y minerales que nos ayudan a nutrir nuestro organismo y hacer que este funcione correctamente. Por este motivo, si llevar una alimentación poco nutritiva, no estás cuidando de tu salud y, por tanto, es normal que sufras enfermedades como los resfriados.
Consejos para prevenir los resfriados
Para prevenir un resfriado, es importante que tengas en cuenta algunos consejos que te ayudarán a fortalecer tus defensas y a poder estar más protegido ante el ataque de infecciones externas como bacterias o virus. Es importante seguir una dieta nutritiva repleta de vitaminas y minerales que nos ayudarán a tener nuestras defensas en perfectas condiciones.Las vitaminas A, E, B y C son imprescindibles para que nuestro sistema inmunológico trabaje a toda máquina y, por este motivo, deberás introducir estos alimentos en tu dieta de forma diaria. Entre los alimentos ricos de estas vitaminas destacamos:
- Frutos rojos (cerezas, fresas, arándanos, etc.)
- Vegetales verdes (espinacas, brócoli, acelgas, etc.)
- Cítricos (naranjas, mandarinas, pomelo, etcétera)
Además de esto, es importante que te prepares para evitar el contagio con una persona que esté resfriada, para ello, lávate las manos varias veces al día, sobre todo, después de haber estado en contacto con gente o en lugares públicos. También se recomienda que se ventilen los espacios en los que conviva mucha gente (oficinas, casas, etc) para que los virus que puedan haberse acumulado, se marchen.
Te invitamos a acudir a un médico en el caso de presentar cualquier tipo de condición o malestar.
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